Dispositivos de protección contra explosiones

Los dispositivos de protección contra explosiones son sistemas diseñados para mitigar o prevenir las deflagraciones de polvo en equipos de filtración y conductos industriales. Desempeñan un papel fundamental en el manejo de polvo combustible, protegiendo al personal, los equipos y las instalaciones de los efectos destructivos de la presión repentina y la propagación de las llamas. Las normativas internacionales como ATEX (Europa) y NFPA (Norteamérica) exigen sistemas de protección certificados para garantizar la seguridad de las operaciones.

Existen dos categorías principales: sistemas pasivos y activos. Los dispositivos pasivos, como los venteos de explosión y los venteos sin llama, reaccionan automáticamente durante una explosión aliviando la presión o conteniendo las llamas. Los sistemas activos, como la supresión química, las válvulas de acción rápida y el aislamiento químico, detectan activamente la presión o las llamas y se activan en cuestión de milisegundos para suprimir el evento, lo que los hace ideales para instalaciones interiores o sensibles.

Los respiraderos antiexplosión están diseñados para abrirse a una presión predeterminada, actuando como el punto débil de la carcasa del colector. Al producirse una deflagración, liberan la presión interna, permitiendo que las llamas y los gases escapen de forma segura. El sistema de ventilación sin llama incorpora una malla apagallamas sobre el respiradero, lo que permite una instalación segura en interiores sin necesidad de conductos externos.